Los cambios financieros empiezan desde adentro.
- Luis Enrique Vallejo Sanz
- hace 2 días
- 5 Min. de lectura
El cambio empieza por casa
Por Luis Enrique Vallejo – Asesor Financiero Personal en Colombia

Se cree que hablar de finanzas personales, es hablar de números. Que todo se soluciona con una hoja de Excel, una aplicación para hacer presupuestos o una estrategia de inversión. Pero en teoría, la teoría y la práctica son lo mismo, y en la práctica te das cuenta de que no es verdad: cambiar tus hábitos financieros es, en esencia, cambiar la forma en la que te relacionas contigo mismo.
He acompañado a muchas personas que, a pesar de tener estabilidad económica o incluso cierto margen para ahorrar, siguen sintiéndose atrapadas. No logran avanzar, se sabotean, o toman decisiones desde la culpa y desde el miedo.
¿Por qué pasa esto? Porque mejorar las finanzas no es solo una cuestión de dinero. Es una cuestión de identidad, de creencias, de coherencia y de valor personal.
Si quieres hacer cambios duraderos en tu vida financiera, apóyate en los números, pero empieza por ti.
Para autoevaluarse y encontrar maneras efectivas de lograr cambios sostenibles a largo plazo, considere estos puntos importantes:
Decir lo que crees. Creer en lo que dices.
Muchos de nuestros problemas financieros se derivan de una desconexión interna. Sabemos lo que deberíamos hacer: ahorrar, gastar con conciencia, evitar deudas innecesarias. Pero no lo hacemos.
¿Por qué? Porque no estamos alineados.
- Decimos que queremos tranquilidad, pero nos comprometemos con un estilo de vida que no nos alcanza con nuestros ingresos.
- Decimos que valoramos la estabilidad, pero tomamos decisiones impulsivas.
- Decimos que queremos ahorrar, pero no ponemos límites.
- Decimos que no nos gustan las deudas, pero pagamos las compras a más de una cuota.
El primer paso es alinear tus decisiones con lo que crees.Y para eso, necesitas conocerte. No para convertirte en alguien perfecto, sino para poder actuar desde la verdad.
Ser coherente con tus valores (aunque a veces duela)
Hay momentos en los que ser coherente con tus valores cuesta. Por ejemplo, cuando todo el mundo a tu alrededor está comprando carro, viajando o hablando de nuevas inversiones, y tú decides que por ahora prefieres construir un fondo de emergencia. No es fácil decir “no” cuando el entorno te grita “sí”.
Pero tu tranquilidad financiera no se construye con aplausos ajenos, sino con decisiones propias. Y si logras alinear tus hábitos y decisiones financieras con tus valores, estás en el camino correcto, aunque se vea distinto al de los demás.
Reconocer tus errores (sin darte látigo)
Otro punto clave para cambiar tu relación con el dinero es aprender a reconocer tus errores sin caer en la culpa eterna.
Sí, tal vez te endeudaste por una compra impulsiva. Tal vez no ahorraste cuando pudiste. Tal vez invertiste sin entender y te fue mal. Eso duele. Pero no te define.
Lo que sí te define es lo que haces con eso: ¿te quedas atrapado en el error o aprendes y corriges?Debemos cometer errores que no sean tan caros, pero que nos permitan aprender a tomar futuras decisiones.
Aunque siempre será mejor aprender de los errores de los demás.
Pedir ayuda. Y también ofrecerla.
Uno de los mayores actos de valentía financiera es reconocer que no puedes con todo solo.
Pedir ayuda no es señal de debilidad. Es señal de responsabilidad. Todos necesitamos guía en algún momento: alguien que nos muestre lo que no vemos, que nos enseñe lo que no sabemos o que nos acompañe en una decisión difícil.
Y también, cuando tú eres el que lo tiene claro, ofrecer tu ayuda a otros se convierte en una forma poderosa de fortalecer tu propia relación con el dinero. Porque enseñar también te obliga a aprender.
Poner límites: a los otros… y a ti mismo
Muchas veces gastamos por complacer, por encajar, por no quedar mal. O por autojustificarnos con frases como: “me lo merezco”, “para eso trabajo” o “solo por esta vez”.
Aprender a poner límites es un acto de amor propio financiero.
Decirle no a un gasto innecesario, a una deuda por presión o a un estilo de vida ajeno no te aleja de los demás: te acerca a ti mismo.
Pero los límites también aplican hacia adentro:
¿Te hablas con dureza cuando te equivocas?
¿Te llenas de pensamientos hormigas que no aportan? “igual nunca voy a poder”
¿Te exiges más de lo que puedes manejar?
Aprender a decirte a ti mismo: “esto no lo necesito”, “esto lo voy a pensar mejor”, “esto no es para ahora”… es un gran paso hacia tu estabilidad financiera.
Asumir la responsabilidad de tus decisiones
En lugar de buscar culpables (“el gobierno”, “el banco”, “mi jefe”), hazte cargo.
Porque cuando tú asumes la responsabilidad, recuperas el poder y partes de lo que puedes controlar. Y desde ahí, puedes tomar decisiones informadas, diseñar un plan y comprometerte con tu propio crecimiento.
No necesitas hacerlo perfecto. Solo necesitas hacerlo para tí.
La verdadera pertenencia empieza con la autenticidad
Quizás uno de los obstáculos más profundos que he visto en mis asesorías es el miedo a ser diferente.
Muchas personas se sabotean financieramente por miedo a no encajar. Siguen el ritmo de los demás, gastan para impresionar, callan sus metas por temor al juicio.
Pero la verdadera pertenencia no viene de adaptarte a todos, sino de mostrarte tal como eres. Auténtico. Humano. Imperfecto.
Cuando tomas decisiones financieras desde tu autenticidad, te liberas. No necesitas aparentar. No necesitas complacer. Solo necesitas ser coherente contigo.
Y créeme, eso se nota. En tus cuentas, en tu tranquilidad y en tu bienestar.
¿Cómo empezar ese cambio?
Aquí te dejo algunos pasos sencillos (pero poderosos) para iniciar el trabajo personal que transforma tus finanzas:
1. Haz una pausa antes de cada gasto
Antes de gastar, pregúntate:¿Este gasto está alineado con lo que realmente quiero?Si no lo está, respira. Y decide desde la calma.
2. Revisa tus creencias sobre el dinero
Anota frases que creciste escuchando:
“El dinero es sucio”
“Nunca alcanza”
“Tener plata es de gente interesada”
Luego, cuestionalas: ¿Te ayudan o te limitan?
3. Define tus propios valores financieros
¿Qué es importante para ti? ¿Seguridad? ¿Libertad? ¿Contribución?Diseña tus decisiones en función de eso.
4. Acepta que no todo saldrá perfecto
Habrá errores. Y está bien. Lo importante es que cada error te acerque a una mejor versión de ti.
No se trata solo de cuánto ganas, ni de cuánto ahorras, tampoco de lo que los demás piensen de ti.
Se trata de quién eres cuando tomas decisiones financieras.
¿Te conoces? ¿Te escuchas? ¿Te respetas?
Tu relación con el dinero es un reflejo de tu relación contigo.Por eso, antes de cambiar tus números, cambia tu diálogo interno.Antes de organizar tus cuentas, organiza tus ideas.El cambio financiero empieza por dentro. Y cada paso que das hacia conocerte, te acerca al futuro que sueñas.
Este artículo ha sido elaborado con fines informativos y educativos. No constituye asesoría financiera personalizada. Se recomienda consultar con un asesor financiero para obtener asesoría personalizada sobre tu situación particular.
Si estás buscando una manera efectiva de mejorar tu situación financiera, te invito a contactarme.
Como experto en finanzas personales, y con la ayuda de un Coach Ontológico podemos ayudarte a:
Identificar tus creencias y patrones limitantes que te impiden alcanzar tus objetivos financieros.
Crear un plan financiero personalizado que se ajuste a tus necesidades y estilo de vida.
Implementar estrategias para optimizar tus ingresos y reducir tus gastos.
Aprender a invertir de forma inteligente y segura.
Tomar decisiones financieras responsables
Comments